UNA REFLEXION PRÁCTICA ¿Sin duda, si te sientes enfermo, concurrirás al médico, verdad? ¿No? ¿Vas a un curandero, o a esa gente de terapias naturales que te garantizan curarte previo pago de interesantes cantidades de dinero? Te gustan las emociones fuertes! Bueno esto sucede con muchas profesiones. En Arquitectura no somos la excepción. Todos tenemos un amigo ó cuñado "manitas" que sabe de todo. Desde un enchufe al derribo de un tabique... Generalmente, cuando no pasa algo más grave, lo que debería haber sido hecho por un profesional, termina convirtiéndose en una "chapuza" o un semi-desastre, de la que te lamentarás por mucho tiempo. Es decir en algo mal terminado, con defectos visibles, caro y con la relación familiar o de amistad seguramente dañada. Vamos a ver. Algunos estudiamos para servir las necesidades de la gente. Los Arquitectos sabemos construir, reparar, ambientar, iluminar, dar una nueva distribución a tu casa mientras no se caiga ...
El Autor del blog es Arquitecto y Diseñador Industrial, graduado en Argentina y con un post-grado en la Universidad Politécnica de Catalunya. En ambas Universidades y en la Universidad de Palermo ha sido y es Docente. Vive en Barcelona desde el año 1989. Es miembro del Colegio de Arquitectos de Argentina y en el de Barcelona. Tambien ha sido miembro del Comité de Expertos del Colegio de Arquitectos de Catalunya. La página del autor es: www.arquitectoweissmann.com. El teléfono es +34 609725240.