Hola!. No es este el título de una novela de misterio. El arte y el orgullo de una pared como se debe hacer. Me refiero a la futura desaparición de un oficio, el de ALBAÑIL , tan caro a nuestra formación. En el futuro (y para ésto no hay que ser futurólogo) este oficio tenderá a desaparecer . La construcción prefabricada, no lo necesitará. Pasarán a llamarse "montadores de paneles" o "instaladores de muros". Con su desaparición, perderemos ese aliado casi incondicional que teníamos en la obra. El tipo que con una "cuchara" en la mano, me maravillaba partiendo misteriosamente el ladrillo justo a la medida para cerrar aquel agujero o hueco que nos quedaba. El que con el mismo instrumento, repartía el revoque o el mortero justo en el sitio donde le faltaba a la pared. Ese asistente casi perfecto , que nos acompañaba en la obra desde el principio hasta el fin. El que cuando te daba la mano, notabas en ella, la aspereza de kilos de cemen...
El Autor del blog es Arquitecto y Diseñador Industrial, graduado en Argentina y con un post-grado en la Universidad Politécnica de Catalunya. En ambas Universidades y en la Universidad de Palermo ha sido y es Docente. Vive en Barcelona desde el año 1989. Es miembro del Colegio de Arquitectos de Argentina y en el de Barcelona. Tambien ha sido miembro del Comité de Expertos del Colegio de Arquitectos de Catalunya. La página del autor es: www.arquitectoweissmann.com. El teléfono es +34 609725240.